3/11/15

EN EL CAMINO

Vuelvo de una ciudad
para anclarme en otra.
Los muros grises, el aliento de los oriundos
los estorninos siguiéndome, formando una manta en el cielo
-que no me tapa-
En el tren pienso, que a pesar de las ventanas, dentro no hay belleza,
que todo lo que veo es pasajero,
-que soy una pasajera más en el trayecto-
que admirar la belleza es anhelar.

Esta ciudad y la mía
siguen estando llenas de ideas, con pájaros vacíos,
de gritos mudos.
Hay gaviotas siempre. Y yo te veo en cada mar de Barcelona,
en los acentos de tanta gente.
Será que no necesito excusas para recordarte,
que todo lo que tiene belleza me atrapa con tu nombre –y tu cara, y el olor de la ropa puesta en ti-
Será, que no hay lenguaje cuando se quiere pensar.
Sólo hay fotografías de Yutha Yamanaka en este puerto, en cada nube sombría
que deja entrever un poco de luz
-para que seamos un poco menos felices-
Podría ser que quiero leer siempre para ver si alguien ya ha escrito sobre ti
o es que te sigo buscando hasta en la más ínfima escena.




28/10/15

AMANECER

Es curioso todo.
Este salón que me hace esperarte, que se ha vuelto mi abrigo mientras llueve fuera.
Suenan pasos en el portal. Sonrío.
Qué simple es todo.

Entras con prisas porque quieres desvestirte lo antes posible.
Las paredes y yo te seguimos con la mirada,
esperando atención
-me dan ganas de ser más invisible-
Es eco todo.

El aire que has provocado al pasar rápido,
-corriendo hacia el otro extremo de la casa ,sin pausa-
me huele distinto.
Tu mirada es distinta, tu forma de andar, TODO.
Qué distinto es todo.
Tienes la expresión de un moribundo
-creo que te estás muriendo en casa.
Creo que me estás matando desde la cocina-

Echo de menos leer las páginas negras de tus silencios,
escuchar a los libros contigo,
que la tele nos mire apagada,
que hablemos sin sonido- como los protagonistas de «Amanecer» de Murnau.
¿Eso pasa? ¿Tú eres el granjero y yo la mujer engañada?
Qué inverosímil es todo.

Empiezan a caer hojas de otoño del techo,
tus labios ya no me huelen a orégano
y oigo a los gorriones de la calle llamarme para que salte
-y tú, sigues en la cocina, tarareando un tango. Queriendo ser ajeno-

Eres como la luna
-y no en un sentido poético-
vas provocando mareas,
y yo me quedo aquí ahogada, a la orilla del sofá
                            llena de sedimentos.

Voy caminando hacia el pasillo
-quiero ir con los gorriones-
deshago la puerta a mordiscos,
para dejarte todas las astillas
-y que se te claven-
Soy sigilosa. Soy un pájaro.

Estás a punto de dejar de quererme.
Prefiero ser gorrión y no ver el «Amanecer» de Murnau.
Es alquitrán el cielo.
Y tú una ciudad canalla.


19/10/15

NENÚFARES

Ahogada entre nenúfares
que se esconden en sus pulmones,
-que la asfixian y no la dejan vomitar tranquila-
dormida entre juncos
que la atrapan
-y la enredan con sus ansias de posesión-
para hundirla, disecarla.
Su cadáver pesa
pero Blanche dice que los funerales son más bonitos que la muerte
-al menos será belleza rodeada de velas-
Hay tierra en su garganta y en su estómago
sedimentos de felicidad que no logró alcanzar,
son palabras que nunca dijo
silencios que hizo vacíos en sus entrañas
-no se lo digas a nadie, le decían-
Y tiene secretos en jaulas de titanio.
Su corazón es un yunque
que la está arrastrando,
cuya negra sangre es también alimento de mirlos que no tienen pico.
Y en su plumaje ella encuentra cama,
y se alía con la muerte
porque quiere llorar a gusto
porque quiere reír en los silencios
desde las cloacas
-y observar desde un contrapicado el mundo-.

Hay que tapiar las tristezas, se dice.
-porque nadie antes se lo dijo-
Cementar los terrores y esconder todos los martillos,
ordenar que quemen las llamas,
                 que el fuego mismo se queme

y los nenúfares no la rescaten.

14/10/15

TROCHILINAE


Mil doscientos latidos por minuto,
Puede que mi vida acabe en media hora.
                      -que deje de chupar las flores y que las flores mismas me dejen de parecer cadáveres-
Comparo mis minutos vida con los latidos de un colibrí,
-no he arriesgado nada-

Hago sombras chinescas con la forma de un pájaro
a través del proyector
-porque quiero volar, aunque sea con mis manos, aunque no salga de este cuarto-
mientras “La mujer de nieve” de Kaidan viene a buscarme para llevarme al remoto frío.
                  -que me arrastre rodeada de copos de nieve, que mi pelo se vuelva blanco y mis dientes negros-

Podría,
no sé cómo,
pero podría hacer estallar todos los candados
atrapados en los puentes donde algún que otro incauto
quiso dejar anclado su amor hacia otra persona.
-Y que todos lo viésemos.
                                                      Teníamos que saber cuánto se quieren-

Parece que soy la única
cuyo néctar es saber que la tristeza sigue existiendo
en pequeñas dosis.

Tú y yo somos más altos que las montañas,
no sé si lo sabes.
Podríamos volar incluso más alto, hasta donde quieras.
Mi pico podría alargarse como el de ése colibrí morado
para chupar tu dulce esencia.


Sigo encerrada en este cuarto lleno de sombras
Sigo pensando que podríamos hablar siempre
sin horas, sin paredes.

Ahora que lo pienso, creo que ese colibrí ha vivido más que yo.

Ahora que lo pienso, creo que germinará un nuevo corazón en mí
y dejaré de quererte. 


11/10/15

ENCUENTRO NÚMERO «N»

Uñas pintadas con boli Bic
y labios pintados con el líquido
de una ciruela madura, blanda
-que chorrea tinta en cada mordisco- 
Ser poeta
escribiendo en papel higiénico
y durmiendo en algún rincón de la calle Argumosa
-porque Julio Verne también viajaba en sueños-
¿Se puede escribir sin haber leído?
Él cruza la ciudad
con sus ojos de ciervo,
con sus orejas de gato
bebiendo vino en un vaso de plástico reciclado
y yo le observo caminar por entre los coches
como si fuera un animal herido en la linde del bosque.
¿Se puede ser animal sin ser salvaje?
Escarba en sus bolsillos en busca de
alguna moneda
-como cuando haces un hoyo en la arena de la playa
para hacer un castillo-
pero no encuentra nada
y se sienta a mi lado.
Somos dos virutas de un lápiz de color negro
en este portal destartalado.
¿Se puede ser desecho sin haber nacido?
Saco una moneda y se la regalo
se la pongo en la nariz de lobo que tiene
y no sonríe.
Prefiere entonces cogerme la mano,
apretármela fuerte, como si fuera su presa
y mirarme con esos ojos de ciervo
en cuyo reflejo veo a los coches pasar tras de mí.
-como si tuviera canicas en lugar de ojos-
Pero entonces se levanta y se marcha.
Me cansa mi pecho
hasta que creo que vuelve hacia mí de nuevo
-sí, vuelve-
Me trae un vaso y bebemos vino
en este portal destartalado
como si fuéramos dos virutas de un lápiz de color rojo
-como si no existiéramos para el mundo-
Se acerca lentamente hacia mí
Y me da un beso con las pestañas.
Tanto cosquilleo ha hecho despertar un montón de hormigas en mi estómago.
Me quedo callada- prefiero que hable él. Prefiero saber yo de él-
Tiene un nombre corto y un pelo largo. Unas manos secas y los labios húmedos.
Me molestaría tener que irme de este portal destartalado.
No volver a ver sus ojos de ciervo,
no poder secarle los labios con mis besos,
-ojalá este vaso de vino dure siempre.
que estas dos virutas no se conviertan en colores-
Que este portal destartalado
nos atrape.
Se levanta. Creo que me va a decir «adiós»
Y yo quiero volverme sorda y no escuchar nada.
Me tiende su mano de orangután
«¿Nos vamos?»
Ése “nos” …
-tan bonito
Tan aterrador-
Somos dos figuras negras que se alejan de la ciudad.
¿Se puede ser sombra sin haber visto luz?

10/10/15

I LOVE YOU MOTH

Tiré toda la ropa que había usado contigo
-o la regalé, no me acuerdo-
Dejé de escuchar a Yann Tiersen
porque sus discos
eran la sábana que nos tapaba
mientras hacíamos el amor.
-Siempre con música. No para no escucharnos
sino porque temíamos
que la calle nos gritara pidiéndonos salir
y no queríamos oír nada ni hacer otra cosa-

Dejé de pisar ciertas avenidas,
en las que las farolas nos cubrían
para taparnos del resto de sombras
-para protegernos de la amenazante realidad-
Dejé de ir a determinados bares
donde dibujábamos con vino las servilletas
-y doblábamos también para escribir palabrotas-
Y ahora mi gata
me trae de cena polillas
-decenas de polillas-
Y entonces miro la mariposa
que tengo tatuada en la espalda
y pienso que lo nuestro
era todo esto: “Lo bello y lo triste” de Kawabata.


                                Una mariposa que quiere ser polilla.

8/9/15

LÍNEA 1

Tengo un amigo que cuando camina abraza a los árboles.
Dice que es como cuando alguien te cuenta sus tristezas.
Tú, por ser oídos, guardas parte de esa melancolía.
«Con los árboles es lo mismo», dice.
Los abraza para pegarles todas tus manchas negras, creo.
Por eso siempre elige árboles centenarios, fuertes. Como castaños o chopos para que aguanten toda su pena arrastrada hasta el encuentro.
Y mientras me cuenta esto yo pienso en que ya no se envían cartas, que ya no existen los sellos. Que la gente no silba por la calle, y el que lo hace está majara.
Yo sigo mirando los pies por la calle y las pestañas de la gente cuando mira a su móvil-por la calle, por la acera, en los bares, con sus amigos, en el trabajo, en la cama, cuando abraza-
Oteo la suciedad en las paredes y cristales de los vagones y me pregunto cómo habrá llegado hasta ahí y pienso después, al alejarme, que si no hubiera sido por la suciedad no me habría fijado en esas paredes y cristales.
Una chica entra llorando: «¿Tienes un kleenex?»
-Claro- le sonrío.
No me lo agradece y me mira mal. Lleva un moño lleno de malas ideas y un pantalón adornado con la ceniza del cigarro que se acaba de encender en el vagón. Quiere demostrar que ella es libre, pero no hay peor atadura que tener que demostrar siempre lo que no eres.

Abro el libro «Soy yo, Edichka» de Limonov y pienso que yo también querría ser un poeta exiliado- no por lo de exiliado sino por lo de poeta vilipendiado que llora whisky cada noche- y que hay demasiados escritores, eso también lo pienso- no porque haya demasiados sino porque no me dará tiempo a leer todo- y entonces me dan ganas de salir corriendo a buscar un árbol, uno fuerte y que me rompa en dos, como si fuera una de esas ramas que le cuelgan, de un abrazo.

28/8/15

BARBAS, TICS Y CALCETINES

Este cuarto huele a canciones
que se escuchan por las mañanas.
Está infestado de olores en los calcetines
que tienen un poco de ti
y un poco de detergente.
Abro la ventana y sigue oliendo
a personas obesas que huelen a Nenuco.
-da igual, tus manos siempre huelen a tormenta-

[Querría tener un antojo,
una mancha con tu olor en mi piel
y que sólo pudiera olerse cuando hay lluvia.]

Qué fácil era restregarme por tu barba
como si fuera un gato,
que me regañaras por marcarme una equis en la piel
-porque había sido el festín de los mosquitos
la noche anterior-
«Te harás daño», me reprimías.
Qué fácil era hacer de mis delitos souvenirs
y regalártelos
-y más fácil era regalarme el daño-

Este cuarto
huele ya a agua reseca,
a ceniza descompuesta
muerta en el retrete.

Y en medio de este pasillo
lleno de camas abandonadas,
-de sábanas que son piel-
me sigues oliendo a tarde en la sierra
infestada de truenos que buscan decapitarme
y que no se van a conformar con hacernos lodo.
-Mejor. Será mejor volvernos agua. Hacernos líquido-
Qué fácil era
controlar tus tics
y ponerlos en el congelador.
«Ahí se enfriarán y se quedarán tiesos»
-para que no se movieran más-
Y hacer de las tardes
una funda en el sofá.
Pero me sigues oliendo a nube desecha, a media luna
-porque la otra media no quiere salir-

Querer que me gusten otras personas por tu olor
es una escalera inclinada con peldaños diminutos
-interminables-
Y tú sigues desprendiéndote
a lo lejos…
Desechando olores, sin quererlo, en el baño de algún bar
-o en alguna habitación perdida de Madrid-
Qué fácil sería no ser nariz, Quevedo.

24/8/15

AVE NO VOLADORA

Odio a la gente que confunde
a los escarabajos
con las cucarachas.

Querer dos veces
a la misma persona
también es posible
y no es enamoramiento,
es ser un pingüino que no vuela. 


21/8/15

PRECISAMENTE

Como todas las ballenas
que van a suicidarse a la arena,
amar sin despedazarse,
correr sin sudar,
todas las larvas que fueron mariposas
a nuestros pies
-ellas fueron precisamente las inmortales-

Es preciso,
que todas las calles nos golpeen
la cara
antes de hundirnos en el cemento.

Como si fuera fácil
mirar a lo lejos
queriendo estar cerca.

He limpiado las ventanas
para que el cielo vea
cómo llueve dentro de casa.

Como todas las moscas
que van a suicidarse a tu piel.
-llorar sin cerrar los ojos-

Todos los lápices que no supieron dibujar
-ellos fueron precisamente los coherentes-
Precisamente soy insecto
y tú una planta reseca en mi balcón.

Es preciso querer volar
con las alas atrofiadas,
ser suicidas con vida.

Que la casa se derrumba
que se desintegran las paredes,
precisamente ahora que quiero
ser entraña en este jardín de flores.



17/8/15

SI EL UNIVERSO COLAPSA


Estamos hechos de tiempo
o de negros cuervos
que duermen bajo arena.
                          -¿Dónde guardan sus plumas?-
El tiempo, el tiempo,
el tiempo...

El espacio es una alcantarilla
cerrada
en el suelo movedizo de tu cuarto
                        - ¿o era el nuestro?-
El espacio, el espacio,
el espacio...

¿Qué me diría Hawking
si afirmara que sólo hay desagües
espacio-temporales
en cada despedida?

Sólo hay cabezas flotantes
(im)pensantes
en estos bosques
                      -¿dónde están sus sombras?-

Que nos guarden todo el espacio
-en los océanos si hace falta-

Me van a quitar el tiempo,
nos lo van a quitar.

Si el universo colapsa,
buscaré la forma de que seamos
gusanos y agujeros,
                       -¿cuándo hemos sido materia tú y yo?-

14/8/15

ANTES ERA SONIDO


Se han caído todos 

los pájaros del cielo.
Se han posado en mis hombros, muertos
cuando iba a buscarte 
a la librería. 
Y allí estabas, 
en cada una de las líneas, de las tripas 

- pero sobre todo en los huecos, en las letras sin sonido -


Un pájaro sobre mi hombro 
habla contigo: "Cómete su tristeza "
"Pero a mí me gusta estar triste ", dije.
- puntos suspensivos -

Los pájaros siguen muertos 

-será que no tienen voz -

Cierro todos los libros, 
te dejo ahí encerrado.

Yo tampoco quiero tener voz. 



4/8/15

IN AND OUT


Me pongo las gafas en la nuca,
para ver por fin lo que se me escapa.
- no quiero perderme nada, ni los espacioes negros 
de tus pestañeos- 
                Y si pestañeas, que sea para soñar ese segundo. 
  Y después despertar...

Me he puesto los vaqueros del revés, 
porque mi corazón hoy también está dado la vuelta, 
porque los viejos en el banco del parque
-y en los bares 
y en el supermecado-
me han dicho que para ser anciano
hay que tener una personalidad reversible. 
Ser yo y no ser yo, quiere decir. 
Ser yo sin dejar de no ser yo. 
Creo que es, ser reversible
para que puedas usarme

y no me duela...




27/7/15

ESO ERA


Desgarrar las cortinas
de las casas inhabitables 
de alguna ciudad favorita.
Saltar a la comba hecha con cristales 
y querer que te pinchen
Agarrar con fuerza los tallos de una rosa
-para quedarme con las espinas y soltar los pétalos
al final del vagón en el que tú vas leyendo sin mirarme-
Eso era contemplarte
y casi quererte.

Querer dormir en un pantano y que nunca entre el sol. 
Hacer nidos con clavos 
y que nadie nos desancle 
-o poder planear el cielo y pensar que los idiotas 
son los que pisan tierra-

Y sin embargo, 
a pesar de las ciudades invisibles 
que te he construido,
-en donde siempre era yo ciega y tuerta-
no supe tener un corazón elástico
que te diera de sí
¿quién va a guardarlo en una caja con cerrojo?

Y si soy un tornado 
-y destruyo y arrollo- 
déjame arrastrar los ladridos
y los silbidos distraídos en las calles.

Querer llorar y no beber lágrimas.
Eso era perderte. 



24/7/15

ALEJANDRA


Dice Alejandra que hay que llorar hasta romperse. 
Y es «dice» porque no está muerta. 
Me peino las pestañas y me pinto el pelo. 
Me desdibujo la cara, 
entre grietas en el espejo que me deforman. 
Quiero que se vea lo imperfecta que soy.
lo triste, también. 
-todos las muñecas de porcelana y yo queremos rompernos-
Yo le contesto a Alejandra: «he llorado tanto
que ya nací rota».



22/7/15

MORTAJA

Quiero ser el pájaro que te lo cuente todo,
abrazarte y llenarte de plumas.
Acercarte al sol,
quemarnos juntos
y que nuestras cenizas
sean el alimento de otros pájaros suicidas.
Que el viento
sea nuestra mortaja
negra y hastiada.
Moriremos donde han nacido todos los cipreses. 
Porque van a matarnos, 
van a morirnos, 
todos los cuervos resentidos. Todos los buitres hambrientos. 
Todas las lechuzas en busca de la noche para darnos caza. 
Nos sobreviviremos con tanto alambre en nuestras alas, 
con tantas balas muertas en nuestros pechos. 
Desgárrame tú antes. 
Que antes de ti yo no quise ser pájaro. 



16/7/15

REWIND



Soy un capullo, un conato de flor que no sabe cómo abrirse. 
Y todas las macetas parece que están llenas de cristales, de objetos punzantes que van a arañarme si intento vivir allí.
Una historia repetitiva, un cliché, soy un botón de rebobinar 
hacia atrás. 
Un tren que no quiere subir la montaña
y quiere matar a todos los pasajeros. 

Todo el tiempo que ha pasado, 
todos los segundos que se quedaban atascados porque no querían correr
todos los días que no llegaron a ser noches
todas las horas que tenían yunques en los pies
todo el tiempo que ha pasado ya
me ha arrastrado
y ahora sólo quedan una escoba y cenizas 
y yo no sé recogerme.

Estoy hecha de intenciones sin promesas, 
de sueños sin acciones, 
de querer sin saber. 
Que pasen otros 
que quieran ser rosales,
que quieran ser rosas blancas
pintadas de rojo.


Lo peor, es que nunca quise ser flor
Lo peor, es que quiero ser carbón negro
viviendo en una maceta.


23/5/15

QUID PRO QUO


Voy a quererte hasta que te duela.
Voy a dolerte tanto
que no querrás saber si el mundo sigue siendo tan horrible
o si las calles están repletas de cadáveres
que se negaron a llorar. 

Voy a dañarte tanto con todo lo que siento,
que te dará igual saber que te has vuelto mundano en mi cuarto.
Vas a llorarme tanto
por haberte vuelto mortal
que te dará igual secarte por dentro  para darme de beber tus lágrimas.

No es una amenaza.
Me lo debes. Me debes quererme.
Debes quererme.
Tú ya me doliste antes de saber hablar.
Cuando éramos yo y mi mutismo y todos los tornados en mi estómago.

Si no es hoy
mañana volveré a aprender a reír
Y todo el amor que me debes,
toda esa deuda que tienes conmigo,
se habrá convertido en una bandada de pájaros migratorios
y yo me habré comido todas sus jaulas. 


12/5/15

AHORCADO

Voy a ahogarte hasta el fondo de mis lágrimas. Ya flotarán mis penas después.
Llegué a creerme de verdad que eras todo el espacio en mi universo. Pero en realidad eras un enorme oso dispuesto a atacarme.
Eras el jugador que se frota las manos cuando se sabe ganador. 
¿Por qué?
¿Por qué lo haces? 
¿Por qué? 

Mis preguntas siguen palpitando en mi cabeza como una noche de tormentas y tu nombre son los truenos que no me dejan dormir. 
Juguemos al ahorcado. Que con palabras sí puedo matarte. 
Tienes razón al pensar que eres mediocre. 
Lo peor de todo es que me has hecho ser una hormiga porque me he dejado. 

¿Por qué? 
¿Por qué lo hiciste? 
Me ahogan, me aplastan, cada una de las letras de tu nombre.
Eres mi manzana podrida y me has contagiado toda tu tristeza.
Y yo soy todas las cenizas de lo que éramos. Si es que éramos algo. Todas estas cenizas que me han dejado llena de sedimentos por dentro y que me harán desaparecer si sigo dejando que me comas y me desgarres.
Voy a marcharme. Aunque no te importe.

Aunque sea mi pesadilla no verte. Aunque este “adiós” sea un latigazo en mis labios.



18/3/15

SIN DÍAS


Cómo me duele cuando te vas
¿Qué el qué me duele?
Me duelen las pestañas al cerrar los ojos, las lágrimas que se me acumulan dentro y que forman montañas en mi alma.
Me duele que no necesites mirarme a cada instante como hago yo.

La felicidad me ha dicho que no me espera más. Y yo le he dicho que o vienes conmigo o siempre seré triste. ¿Te das cuenta?  Seré triste y no será algo momentáneo. No estaré triste.
Viviré sin ser.
¿Cómo es eso de irse y pretender no cavar pozos en el suelo debajo de mí?
Maldita mirada. Esa que tienes tú y que en otro me resultaría banal. Esos ojos joder, que me rompen, que me hacen añicos y me hacen preguntarme hasta cuánto sabrías quererme.
Y que me gustaría ser tú, que nos intercambiáramos y sintieras todo esto. Para que llenaras tu tiempo solamente pensándome. Para que yo fuera el tiempo libre que ocupas soñando. Para que pensar en mí fuera lo único bueno de todos tus días.
Y yo siento que me quedo sin mañanas para decirte que lo único que temo en esta vida es morirme después que tú. Tener que existir sin estar tú.
No sabría cómo reír.
¿Volverás aun sabiendo que quieres irte?
¿Empezarás a verme antes de quedarte ciego?
Tienes que dejar de dolerme porque llegará el día en que no recuerde cómo darme la vuelta cada vez que aparezcas.
Déjame al menos tu rastro para que así puedas perseguirme cuando quieras que sea yo quien te salve de tanta tristeza.